Cómo evitar que tu perro deje de masticar artículos en tu hogar




La masticación es un comportamiento natural para un perro de cualquier edad. Masticar logra muchas cosas. Limpia los dientes, fortalece la mandíbula, combate el aburrimiento y alivia el estrés y la ansiedad. Sin embargo, los cachorros y los perros de edad avanzada tienden más a tener malos comportamientos ya que les parece agradable masticar, aunque muchos de sus propietarios no están de acuerdo. La mayoría de los dueños de perros han experimentado artículos para el hogar dañados como consecuencia del comportamiento de masticación de sus mascotas. La clave para mantener una relación humano-canina sana está enseñando a su perro lo que está bien para masticar y lo que no.


Aquí algunas formas para corregir ciertos errores de masticación de tu perro:

Se debe entender por qué los cachorros y los perros mastican. Los cachorros experimentan el mundo a través de la boca, al igual que los bebés humanos lo hacen. Esta es la forma principal en la que exploran su entorno, masticar ayuda a aliviar las molestias de la dentición que generalmente ocurre alrededor de los 6 meses de edad. Algunos perros adultos tienen hábitos de masticación destructores, derivados de otros problemas como la ansiedad de separación, el estrés y la frustración. Algunos perros incluso llegan a succionar la tela (lamer y masticar sobre tela), ya que fueron destetados antes de tiempo.

Se le debe disciplinar al perro solo cuando lo detecta en el acto, debido a que los perros asocian el castigo con la actividad de inmediato, y no razonan acerca de las cosas que sucedieron antes, ellos actúan por costumbres y disciplina, por ello se le debe disciplinar de inmediato, dicho te otra forma, cuando esté realizando dicha actividad, pero sin maltratarlo, simplemente corregirlo y una vez que el perro se detiene, inmediatamente felicitarlo.



No debes dejar al perro sin supervisión y mucho menos mientras son cachorros y tienen la disciplina adecuada, y sus reglas bien establecidas. Los perros son como los niños muy pequeños y deben ser observados de cerca. Debes mantener a tu perro en el mismo cuarto donde tú te encuentres, en todo momento, lo que minimiza la posibilidad de daño. Coloca los objetos de valor fuera de su alcance, así como zapatos, ropa y cualquier objeto que el pueda romper, para reducir tentaciones o dañar a tu perro. Cuando no puedas supervisar a tu perro, use una jaula o transportadora especial para perro, esto solo es un preventivo valioso para evitar la masticación destructiva. También puedes aplicar aerosoles que por su sabor y olor pueden disuadir a tu mascota, ya que están disponibles para hacer que los artículos huelan desagradable, sin embargo, estos productos deben aplicarse con frecuencia para mantener su eficacia.



Dale a tu perro algo apropiado para masticar, de esta forma puedes reorientar su mala conducta, los cachorros y perros necesitan juguetes seguros y apropiados para masticar, puedes dejarle uno o dos juguetes a su disposición, teniendo también algunos otros de reserva para que los puedas ir rotando, esto mantiene a tu mascota interesada, así como también debes felicitar a tu perro cuando mastique dichos juguetes, esto reforzara el buen comportamiento y la reorientación.



Debes proporcionarle a tu perro estimulación mental y física, ejercitarlo con caminatas y ejercicio, así como jugar con el, esto aliviará su aburrimiento, estrés y lo mantendrá saludable. El entrenamiento de obediencia es una manera de proporcionar tanto la estimulación física y mental al mismo tiempo y jamás maltrates a tu perro ya que esto no corregirá su mal comportamiento.


Como entrenar a un perro para terapia



Un perro de terapia requiere una formación diferente de un perro de asistencia para personas con discapacidad o perros de servicio. 




El objetivo de un perro de terapia es ofrecer consuelo y compañía a los pacientes en hospitales, hogares de ancianos, centros mentales o visitar bibliotecas y escuelas. 




Además del entrenamiento básico de obediencia, los perros de terapia necesitan entrenamiento especial para pasar el AKC (Buen Ciudadano Canino) y el Certificate (CGC) así como los requisitos internacionales para ser un perro de terapia y entrar a los diversos programas de perros de terapia.



Cosas que necesitará

1 - Collar de hebilla simple o arnés
2 - Correa

Instrucciones:


- Debes elegir un perro con una actitud calmada y amistosa. Los perros hiperactivos o aquellos que no muestran interés por el mundo que les rodea no serán buenos perros de terapia.

- Utiliza el refuerzo suave, positivo, para enseñar los comandos básicos del perro. Tiene que aprender a venir, sentarse, quedarse quieto y hacia abajo. Todos los perros de terapia deben ser domesticados, amables, cálidos y estables, así como tener buenos modales y habilidades de obediencia.

- Enséñale a tú perro que está bien que personas extrañas se acerquen a hablar contigo. Tu perro no puede convertirse en protector si alguien te toca, te da la mano o te da una palmada en el hombro.

- Lleva a caminar a tu perro a lugares públicos y trata de llevarlo a una gran variedad de eventos al aire libre, tales como desfiles, carnavales o mercados así se acostumbrará a ruidos y multitudes, pero siempre de forma calmada y estable.




- Educa a tu perro a que ciertos comportamientos no son aceptables, incluyendo saltar, olfatear, estar ladrando, lamiendo y gruñendo.

- Debes mantener la salud de tu perro y el aspecto, llevándolo para los chequeos de rutina con su veterinario. Esta experiencia le preparará para que el examinador lo inspeccione y evalúe, pero antes que eso suceda el perro no deber ser tímido o resistente.

- Enséñale a tu perro a no tirar ni tensar su cuerda. Debe caminar con una correa sin tensión para darle seguridad al perro y demostrarle que tu tienes el control completo sin quitarle seguridad a el.

- Lleva a tu perro al parque para perros, de esta forma aprenderá a jugar y convivir bien con los demás. Un perro de terapia debe aprender a no mostrar más que un interés casual con otros perros cuando uno se detiene a hablar con otro dueño de algún perro o alguna amistad.




Antes que nada debes mostrar una actitud positiva, sin enojos y de forma calmada, socializar a tu perro para que cumpla el objetivo deseado y tengas contigo a la mejor mascota y a su vez pueda beneficiar y dar alegría a otras personas, ya que siendo un perro de terapia convivirá con muchas personas haciéndoles un bien en cuanto a su estado de ánimo.